Un grupo de antiguos jugadores del Club Balonmano Boscos Monzón reactivaron en 2013 el interés por este deporte, extinto en la capital mediocinqueña en la década de los noventa. Actualmente afrontan la cuarta temporada de un proyecto que cuenta con algo más de 50 jugadores entre categoría benjamín y cadete. La directiva busca patrocinadores para así poder consolidar una estructura en crecimiento.
El patio del colegio Minte fue el escenario de los primeros brotes verdes de la reaparición del balonmano en Monzón. Varios voluntarios, con Ismael Palacio a la cabeza, se empeñaron en recuperar la práctica de este deporte de equipo. La captación por los centros escolares y la promoción, con la ayuda del Club Balonmano Huesca, fueron las primeras iniciativas llevadas a cabo. “Comenzamos la temporada 2013-14 con alrededor de una docena de chavales en edad alevín. La actividad se desarrollaba como una extraescolar del colegio en la que se enseñaba a los participantes lo más básico de este deporte”, indican desde el club. Al año siguiente el número de jugadores se multiplicó por dos, se creó un equipo infantil y se consolidó el de alevines. Los entrenamientos comenzaron a dar sus frutos y la evolución de los jugadores se hizo palpable. La disputa de los primeros partidos amistosos por parte de los chavales evidenció que poco a poco el sueño se estaba convirtiendo en realidad.
La temporada 2016-17 fue decisiva, se afianzó la actividad del club, se superó la barrera de los cincuenta jugadores y comenzaron a llegar los primeros resultados positivos. Destacar el cuarto puesto logrado por el equipo infantil en los Juegos Escolares de Aragón. Por su parte, los equipos alevín y benjamín dejaron buenas sensaciones en la liga organizada por el Club Balonmano Huesca. “Al margen de los resultados, nuestra intención es ofrecer a la sociedad de Monzón y alrededores una alternativa de ocio. Enseñar a los chicos una serie de valores humanos: compañerismo, integración, solidaridad, sacrificio, esfuerzo…”, explica José Luis Sanjuán, miembro de la actual directiva.
La estructura está dirigida por Ignacio Mínguez, como Coordinador Deportivo, y Enrique Sánchez es la cabeza visible de un grupo de entrenadores que trabaja concienzudamente con este grupo de chavales. “Están haciendo muy buena piña entre ellos y también con jugadores de otros equipos. Me gustaría destacar la buena relación con Bada Huesca, cuyo primer equipo está jugando en liga ASOBAL, un buen espejo en el que mirarse”, relata Sanjuán. Los jóvenes jugadores montisonenses y sus familias acuden a menudo a la capital oscense a presenciar partidos de la máxima competición nacional, una buena forma de seguir impregnándose de este deporte.
El crecimiento del Club Balonmano Monzón supone un aumento de gastos: en primer lugar motivado por los numerosos viajes a Zaragoza que deben realizar durante el curso, sumado al incremento en el número de licencias y a otros aspectos del día a día. “Estamos buscando un patrocinador principal para seguir creciendo, consolidar una estructura y afianzarnos definitivamente. En estos momentos contamos con el apoyo de Big Mat Ochoa, Mega, Lasaosa, Vilarrubí e Hipo, a los cuales estamos muy agradecidos”. Para el futuro sueñan con lograr poner en marcha una sección femenina e incluso contar con un conjunto senior que permita seguir jugando a los jóvenes cuando terminen su etapa de formación.