La formación creada a finales de verano de 2019 ha visto condicionada su trayectoria debido a la pandemia, pero ello no les ha mermado sus ganas de seguir ensayando y disfrutando con la música. Mallazo está formado por seis jóvenes veinteañeros, su repertorio está compuesto por diferentes canciones del rock nacional, aunque también cuenta con influencias del punk y del ska. La presencia de instrumentos de viento les diferencia de otros grupos similares. Actualmente están trabajando en sus propias canciones y esperan muy pronto presentarlas en sociedad.
Uno de los miembros del grupo recuerda con nitidez el día que realizaron el primer ensayo, era el 14 de septiembre de 2019. Tras alguna pequeña variación de algunos de sus componentes durante los meses siguientes, ese fue el día que el grupo se convirtió en una realidad. Prácticamente todos sus componentes han pasado por el Conservatorio de Monzón, por lo que cuentan con una sólida base musical. “La idea de montar algo se nos había pasado alguna vez por la cabeza, varios de nosotros nos conocíamos o al menos teníamos algún amigo en común y una cosa llevó a la otra. Recuerdo que durante una actuación que estábamos viendo, el cantante de Lizzy la Larga –formación montisonense- se acercó a varios de nosotros y nos animó a que formáramos un grupo”, explican desde la banda. En los inicios uno de los principales problemas era que les faltaba alguien que tocara el bajo, pero tras una solución provisional, Cristina apareció como agua de mayo.
Los primeros ensayos los llevaban a cabo en los más diversos lugares, desde un garaje de la casa de alguno de ellos, un local que les prestaban por unas horas o cualquier sitio donde no molestaran a los vecinos. En marzo, una vez vieron que la cosa iba en serio, decidieron alquilar un local para reunirse, en definitiva: el cuartel general de Mallazo. “Nos instalamos allí justo unos días antes de que estallara la pandemia y tuviéramos que confinarnos. Una vez que la situación se ha ido normalizando nos hemos ido juntando para tocar, realizar arreglos de las versiones, preparar nuestros propios temas… La mayoría de nosotros estamos durante el curso viviendo lejos de Monzón por estudios, por lo que aprovechamos los fines de semana que volvemos a Monzón para reunirnos”, explican.
Variedad instrumental
El grupo está formado por Raúl López (violín y voz), Jorge Abadías (trombón y voz), Jorge Martínez (trompeta), Cristina Truc (bajo), David Pintiel (guitarra) y Pablo Peirón (batería). Mallazo tiene su propio sello de identidad, la presencia de instrumentos de vientos les permite dar a las canciones un toque diferente. “Al tener solo una guitarra tenemos que hacer diferentes arreglos y ahí es cuando los vientos entran en acción. Nuestro repertorio está compuesto por canciones de rock español. Tocamos temas de grupos como Platero y Tú, Extremoduro o La Raíz, y también versionamos a otros como Ska-P, Kaotiko, Piperrak o Desakato”.
En lo referente a canciones propias, el pasado 1 de mayo en el concierto que ofrecieron en el entorno del parque de la Azucarera, dentro del Festival de arte, cultura y solidaridad “Primavera Arte”, estrenaron su primer tema de creación propia: “En la Orilla”. En los últimos ensayos que están llevando a cabo dedican cada vez más tiempo al proceso de composición. “Las versiones suenan bien, pero queremos alternarlas con algo más nuestro. La situación sanitaria parece que ha mejorado y cada vez más gente está vacunada, por lo que estamos deseando subirnos a un escenario, algo que apenas hemos podido hacer hasta el momento”, lamentan desde el grupo. Varios de ellos tienen vinculación con la población de Peralta de Alcofea y esperan que allí sea uno de los primeros lugares donde puedan hacer sonar su música en directo.
Emulando a “The Beatles”
La banda británica realizó hace algo más de medio siglo su última actuación, la cual tuvo lugar en la azotea de un edificio. Con ese concierto en el recuerdo, estos jóvenes quisieron hacer algo similar en Monzón y llevaron a cabo un ensayo desde la terraza de la vivienda de uno de sus miembros en el barrio del Palomar. “Jorge se iba de Erasmus y queríamos juntarnos a tocar antes de que se fuera. Era septiembre y aunque no estábamos confinados, las restricciones eran bastante más fuertes que actualmente. Para evitar problemas, llamamos a la policía para avisar sobre lo que íbamos a hacer”, explican. El improvisado concierto duró unos 50 minutos y fueron numerosos los vecinos y viandantes que se dieron cita, respetando las distancias de seguridad, para escuchar su música en directo. “Algunos salían a las ventanas y balcones, mientras que otros se paraban en la calle al escucharnos. Fue una experiencia muy bonita y una buena anécdota sobre nuestra primera actuación con público”, nos cuentan mientras ríen.
Una especie en peligro de extinción
En el Cinca Medio y comarcas colindantes son pocos los grupos de música que han irrumpido con fuerza en los últimos años. Muchos son los que desaparecen al poco de dar sus primeros pasos y lejos queda aquella época donde las formaciones aparecían por doquier. “Está todo muy parado, apenas hay grupos y tampoco hay sitios donde tocar ni ir a ver conciertos”. Recuerdan salas ya extintas como el Serjos o Escuela de Calor y animan a otros jóvenes como ellos a liarse la manta a la cabeza y crear un grupo. “En Monzón tenemos el caldo de cultivo idóneo, con mucha gente que ha pasado por el conservatorio, la Banda o la Escuela de Música, pero después no se acaba de concretar ese interés por la música. En la zona hay pocos grupos de gente de nuestra edad”. Sin olvidarse de citar a formaciones como Au D’Asti, Lo mejor de cada casa o un grupo de chavales de Monzón que hacen trap y rap.
Actuaciones
El verano de 2021 está marcado en rojo en su calendario, ya que esperan que la situación pandémica les permita realizar conciertos allá por donde los requieran. “Mucha gente se puso en contacto con nosotros tras la actuación que hicimos en Monzón en mayo. Estamos muy agradecidos y nos damos cuenta que la gente tiene muchas ganas de que se organicen actividades. Con las medidas adecuadas de prevención estamos seguros que se pueden llevar a cabo”. Por último, destacan que para ponerse en contacto con ellos pueden escribirles un correo electrónico a: mallazorock@gmail.com o buscarlos a través de redes sociales, tanto en Instagram, como Facebook.